La llegada de las privadas

Seguro que piensas que cadenas de televisión  como Antena 3 o Telecinco llevan con nosotros toda la vida. Es posible que con vosotros sí, pero yo nací en una España que sólo tenía un canal y era en blanco y negro. Hasta recuerdo cómo llego la primera tele en color a mi casa…

La llegada de las emisoras privadas es relativamente reciente ya que fue a partir de 1990 cuando comenzaron a emitir en pruebas.  Antena 3 «comenzó sus emisiones en pruebas el 25 de diciembre de ese año, emitiendo durante un mes carta de ajuste, cine y publirreportajes sobre las preparaciones y futuros programas de la cadena, para iniciar las emisiones regulares el 25 de enero de 1990 con un programa presentado por el periodista Miguel Ángel Nieto González al que siguió un informativo presentado por José María Carrascal» (Wikipedia)

Así se anunció Antena 3 durante el mes de pruebas que emitió desde el 25 de diciembre de 1989 hasta el 25 de enero de 1990.

Telecinco (Wikipedia) comenzó sus emisiones el 3 de marzo de 1990 con una gala y poco después comenzó a revolucionar el panorama televisivo español.

La última concesión en iniciar sus emisiones fue una cadena del Grupo Prisa: «El 8 de junio de 1990 Canal+ (Wikipedia) inicia sus emisiones en pruebas, y el 14 de septiembre del mismo año las regulares, ofreciendo por primera vez televisión de pago en España mediante un sistema decodificador de la señal»

Reflexiona sobre los siguientes aspectos:

  1. ¿Podrías sobrevivir en un mundo con un único canal de televisión?
  2. ¿Imaginas no poder ver tus series favoritas al momento a través de internet?
  3. ¿Cómo sería tu vida con tan pocas opciones para elegir lo que ver?

Un comentario en “La llegada de las privadas”

  1. Si tengo que imaginarme un mundo sin poder devorar todas mis series una detrás de otra, y sin tener todos esos canales a mi disposición para elegir lo que ver en TV, tendría que reorganizar gran parte de mi tiempo libre, aunque también tendría sus ventajas (yo y mi afán por ver siempre algo positivo). Por ejemplo, seguramente leería más y saldría más a la calle, aunque sigo prefiriendo poder elegir hacer esas cosas cuando quiera (que las hago), y ver mis series cuando me dé la gana (que por supuesto que también lo hago) 🙂

Deja un comentario